La importancia del hoy

¿Cómo se forma tú hoy, tú tiempo presente?

Es la suma de cada uno de los días vividos.

Todo integrado en el día de hoy.

¿Qué pasa si no le das importancia al día? Si lo vives como un día más, como una repetición del día anterior, como las horas limitadas para hacer todo lo que siempre tienes que hacer pero nunca alcanzas.

Ese es el camino para repetir el mismo día por siempre.

Pausa, si no tienes claridad sobre la repetición, te invito a ver una película un poco antigua llamada el día de la marmota.

El personaje vive literalmente el mismo día una y otra vez, porque se resiste a aprender la lección que le trae el día por vivir.

Yo sé que la mente a veces nos engaña y nos hace creer que la lección cómo ya se conoce, ya tiene nombre y ya se ha vivido tantas veces pues es obvio que ya se aprendió.

Y no es así, eso no funciona así.

Te he repetido muchas veces que saber no es hacer.

El aprendizaje de la lección, así como en la película, se aterriza en el hacer.

Hacer cosas diferentes para en el plano físico dejar testimonio que los otros planos de creación de realidad, el mental y el emocional están alineados con el hacer novedoso. Declarando en congruencia que el aprendizaje ha sido integrado.

Eso es todo, ese es el camino de la reparación, que surge del reconocimiento, la toma de conciencia, el cambio de percepción y la acción de la lección.

Te invito a ver este día como el presente que se decide a tomar el pasado como recurso y el futuro como potencial.

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